Una de las reparaciones o tareas de bricolaje más corrientes en el hogar suele ser instalar o modificar el tendido del cable de antena. Bien porque hemos de cambiar la situación del receptor de televisión, bien porque hemos de instalar un nuevo televisor recién adquirido.
En primer lugar hay que tener en cuenta que una conexión en un cable de antena no va a ser igual a la que haríamos en un cable eléctrico convencional.
De hecho en este tipo de conexiones nuestra principal preocupación ha de ser evitar las interferencias, aislar nuestro cable de potenciales parásitos que estropeen la señal de televisión.
La mejor opción siempre es colocar una toma de antena en cada habitación, y las viviendas nuevas generalmente ya la suelen incluir, pero si no queda más remedio podemos tender un... cableado adicional.
El cable de antena es de tipo coaxial, es decir, está formado por un núcleo conductor recubierto por una capa aislante que a su vez está recubierto, apantallado, por una malla metálica.
Todo el conjunto se encuentra dentro de una funda plástica aislante. La función de la malla será la de proteger, apantallar, la señal que circulará por el conductor interior. Es importante no dañar dicho apantallamiento ya que perderíamos calidad.
Si hacemos una mala conexión entre dos cables de antena, o si el conector está dañado, modificaremos la impedancia lo que redundará en una alteración de la señal transmitida, es decir, la imagen perderá calidad. De igual forma si utilizamos un cable de antena demasiado largo también debilitaremos la señal y perderemos calidad de imagen.
La mejor forma de hacer una derivación para conectar dos aparatos a la misma toma de antena es utilizar una “T” de derivación. La “T” se conectará a la toma de antena de la pared dejando libres dos conectores hembra de forma que podamos conectar el cable de antena de dos aparatos distintos.
La precaución que hemos de tomar es que la distancia entre la derivación y el aparato no debe ser muy grande o perderemos calidad.
Si deseamos crear varias tomas de antena a partir de un único cable deberemos recurrir al uso de un repartidor. El repartidor mantendrá la impedancia, pero debilitará la señal de forma proporcional al número de tomas que queramos instalar.
Si la señal se ha debilitado demasiado en el repartidor, o el cable de antena que debemos instalar es demasiado largo (varios metros) necesitaremos instalar un amplificador de antena en el recorrido. Situado entre el televisor y la toma de antena.
La misión del amplificador de antena, tal y como su nombre indica, consiste en amplificar la señal multiplicando su potencia.
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